“En la noche más
brillante en la vida de Weltgott, cuando millares de estrellas cubrieron el
firmamento en un manto resplandeciente cargado de magia, noche donde la luna
era más grande y luminosa, fue cuando la raza élfica despertó, protegida por la
luz de las estrellas y la luna.
Hermosas y sabias criaturas poblaron la tierra y su esencia
los guio hasta los bosques donde encontraron la armonía con la naturaleza. En
un principio fueron nómadas y vagaban por todas las regiones sin establecerse
como sociedad, algunos de ellos se aventuraron a la mar y hasta ahora es
desconocido su destino, pero su instinto de supervivencia después de que otras
razas intentaran imponer su poder, ocasionó que se agruparan en el bosque que
había sido testigo de su origen, El Bosque de la Luna.
Estar agrupados en una misma región les permitiría
defenderse de otras razas, pero al interior se encontraba una raza divida en
clases, con diferentes ideales, Altos Elfos, Elfos sílbanos y elfos oscuros.
Esta disociación continuaba siendo una debilidad para la raza.
Ciryatan Haldamir, elfo sílbanos sobresalió como el primer
líder de toda la raza, logrando unificar los ideales de las clases hacia un
mismo norte. Este líder fue conocido como “Mac Anu” que quiere decir “El
Guerrero de las Aguas”, esta unificación se mantuvo durante un largo tiempo
pero sin poder negar la esencia de cada clase, lo que llevaba a confrontaciones
que eran rápidamente mitigadas por su líder.
La estructuración de la sociedad élfica no se hizo esperar y
fue nombrado un monarca por cada clase para que de esta manera se tuviera una
representación de las clases en la gran mesa del consejo élfico, el cual seguía
siendo precedido por Ciryatan Haldamir, el elfo silbano que había logrado una unificación
entre la raza y que era honrado dando su nombre al bosque de la luna que ahora
era llamado “Bosque de Mac Anu”
La naturaleza guerrera de los elfos oscuros salió a relucir
con la intención de que todos los elfos lucharan contra las demás razas para
tomarse el poder y convertirse en la raza dominante de todo Weltgott, idea que
no fue bien recibida entre los otros líderes, pero no por eso sería desechada
por los elfos oscuros. Reuniones clandestinas patrocinadas por su líder se
hacían más frecuentes entre estos elfos, generando rencor y desavenencia con
las demás clases.
La discordia reinó entre la raza al punto de que la toma del
poder anunciada por los elfos oscuros tenía ahora como blanco principal dominar
sobre la raza de los elfos convirtiendo a los sílbanos y altos elfos en sus
mayores enemigos. Las otras clases al darse cuenta de estas intenciones,
expulsaron a los elfos oscuros de las tierras de Mac Anu.
El manuscrito cuenta hasta este punto de la historia, tal
vez el escriba haya sido una víctima más de la guerra, los hechos posteriores
fueron narrados por los sobrevivientes y cuentan que después de expulsados, los
elfos oscuros se hicieron llamar drow y tenían como principal objetivo destruir
a los elfos por la deshonra causada. La guerra había comenzado y batalla tras
batalla dejaban sus vidas en las manos de sus antes llamados hermanos. Décadas
de guerras cubrieron los bosques y tanto elfos como drow se debilitaban con el
pasar del tiempo, solo fue cuando los Orcos, otro enemigo natural de los elfos,
se unieron a los drow y matando a Ciryatan Haldamir llevaron a la
desintegración y casi exterminio de la raza.

Una vez saqueadas las tierras, los drow y Orcos se alejaron
y los sobrevivientes continuaron viviendo en el bosque de Mac Anu fundando un
asentamiento alejado de lo que fuera la ciudad antigua, ahora las ruinas
élficas. Los elfos que habitan los Bosques de Mac Anu en la actualidad son una
mezcla de sangre entre las dos clases élficas “altos elfos” y “elfos silvanos”
borrando de esta manera las diferencias entre las dos razas para conformar una
raza única”.